Cuando en 1956 se presentó este conjunto, no existía nada parecido y, aún hoy, no lo hay. La versión moderna de los Eames de una silla de club inglesa del siglo XIX no solo ha perdurado por más de 50 años, sino que se ha convertido en uno de los diseños de muebles más significativos del siglo XX, que se reconoce de inmediato y que sigue siendo de vanguardia.
Silla Wassily
También conocida como Modelo B3, fue diseñada por Marcel Breuer en 1925-26 mientras era director del taller de ebanistería en la Bauhaus, en Dessau, Alemania. Esta silla es un hito en el uso de materiales en el diseño y fabricación de mobiliario. Breuer solía desplazarse a su trabajo en bicicleta y en uno de esos desplazamientos se percató de que si el acero tubular, un material ligero y resistente, podía ser doblado y para fabricar manillares de bicicleta, también podría serlo para la fabricación de mobiliario. Y así nacieron los primeros bocetos de esta silla, la B3.
Silla Barcelona
Diseñada en 1928 por Ludwig Mies van der Rohe y su compañera Lilly Reich, la Silla Barcelona fue creada como mobiliario para una de las principales obras del arquitecto; el Pabellón Alemán para la Feria Mundial en Barcelona de 1929.
Inspirada en las sillas plegables y los apoyapiés en forma de X de los faraones romanos, se crea este moderno diseño con un importante peso intelectual y cultural. El diseño original, previo a la aparición del acero inoxidable y la soldadura, consistía en patas atornilladas en forma de X y un cojín de piel de cerdo, de color marfil.